Seguimos con nuestro diario de viaje sobre el viaje por carretera que hicimos por Irlanda. En esta entrada os vamos a contar que hicimos durante nuestro segundo día por la isla esmeralda.
Teníamos bastante planeado para ese día por lo que decidimos madrugar y aprovechar el día al máximo. Tras desayunar en el hostel, fuimos a descubrir la ciudad de Cork.
CORK
En la entrada anterior ya os contamos un poco sobre esta ciudad, y ahora os vamos a contar qué es lo que visitamos. Nuestro hostel estaba en el barrio de Shandon, un barrio con mucho encanto, muy cerca de la Iglesia de St. Anne, también conocida como “La Mentirosa de cuatro caras” ¿Por qué? Porque antiguamente cada uno de sus cuatro relojes marcaba una hora diferente. En su interior se puede subir al campanario y tañer las campanas.
Muy cerca de ahí se encuentra el Museo de Mantequilla de Cork, se trata de un museo que cuenta la historia sobre el comercio de este producto, el cual fue clave en el condado de Cork. Justo en frente se encuentra un edificio cirular Firkin Crane que era donde se pesaban las cubas de mantequilla, ahora es un centro de danza.

Seguimos nuestro camino hacia al centro, pasamos a través de unos callejones preciosos y que tenían unas vistas impresionantes. Atravesamos la ciudad hasta llegar a la Catedral de San Finbarre, de estilo neogótico, la cual data del siglo VII, su fundador fue san Finbarre, que es el patrón de la ciudad de Cork. Cuando llegamos a la catedral aún permanecía cerrada (ya hemos dicho que madrugamos bastante) así que no pudimos verla por dentro, aunque sólo con verla por fuera ya nos podemos imaginar cómo será de fascinante por dentro.

Nos acercamos a visitar el Elizabeth Fort, que está muy cercano a la catedral y dicen que tienen unas vistas fantásticas de la ciudad, pero faltaba una hora para que abrieran, así que tuvimos que cambiar de planes.
Después de pasarnos por la oficina de turismo de Cork, en la que recopilamos mucha información sobre las rutas de carretera que íbamos a hacer, nos pasamos a visitar uno de los lugares más famosos de Cork y que, personalmente a nosotros nos encanta visitar en cada ciudad a la que vamos, se trata del English Market, un mercado cubierto del siglo XVII, lugar dónde se puede comprar todos los productos típicos de la región.

Una de las cosas que más nos gustan de las ciudades es perdernos por sus calles y eso es lo que hicimos en Cork de camino a Patrick Street, pudimos disfrutar de sus casas de colores y de su arte urbano, que tiene mucho y muy bonito.

Nos habían dicho que desde lo alto de Patrick Street teníamos unas vistas impresionantes de la ciudad, así que nos armamos de valor y subimos hasta arriba, la verdad es que el cansancio mereció la pena. Además, en el parque, nos encontramos que estaban rodando una serie o una película.

Tras disfrutar de las maravillosas vistas pusimos rumbo al hostel, no sin antes pasar por la fábrica de cerveza Murphy’s, que estaba justo al lado del alojamiento, a ver si se podía visitar pero simplemente es dónde se produce la cerveza y no tiene acceso al público.
COBH
Después pusimos rumbo a Cobh. Situada a unos 30 minutos al sur de Cork, esta preciosa ciudad portuaria emplazada en un precioso estuario es el segundo puerto natural ¡más grande del mundo!
Llegamos a la zona cercana a la catedral y cuando fuimos a aparcar en zona azul un vecino bien majo nos indicó que al lado de la catedral había un parking gratuito, y allí que nos fuimos. Justo desde la catedral se ven gran cantidad de casas de colores, que es en parte por lo que se reconoce Cobh. Nos acercamos a la oficina de información para que nos diesen un mapa y centrarnos un poco en la ciudad. Y una cosa nos quedó bien clara Cobh ha estado ligado desde siempre al mar.
En 1720 se fundó aquí el Royal Cork Yacht Club, el primer club de regatas del mundo. De Cobh zarpó el buque Sirius, en la primera travesía de pasajeros del océano Atlántico. No en vano a partir de la gran hambruna de Irlanda salieron desde este puerto más de 2,5 millones de inmigrantes a EE.UU., por ello uno de los puntos clave de esta pequeña ciudad es el monumento de Annie Moore, la cual fue el primer inmigrante en los Estados Unidos en pasar por las instalaciones de Ellis Island en el puerto de Nueva York. Ella partió de Cobh, acompañada por sus hermanos a bordo del buque Nevada en 1892.

Desde allí nos acercamos a otro punto clave de esta ciudad es el Titanic Experience, al que no entramos porque teníamos la agenda súper apretada, pero cuenta la historia del Titanic y de la White Star Line. Todo esto porque allí fue el último puerto de escala del Titanic. Justo enfrente del Titanic Experience se encuentra el monumento al Lusitania, un barco hundido por un submarino alemán en 1915, donde fallecieron 1198 personas y 761fueron rescatados.
De ahí subimos por la calle West view, en busca de la foto perfecta de la ciudad, y tras andar unos 200 metros llegamos a un parque donde paramos para tomar aire, ya que el desnivel es del 45% (sin exagerar ni una gota :D), donde estuvimos tomando unas fotillas, pero no la foto que buscamos… Así que seguimos buscando el sitio un rato más… hasta que lo encontramos! Pero si queréis saber dónde es exactamente, deberéis esperar al mapa del último día!

KILLARNEY NATIONAL PARK
Nuestra siguiente parada fue el Parque Nacional de Killarney, el mayor bosque de robles antiguos de Irlanda, como era ya la hora de comer, y para aprovechar bien el viaje, decidimos prepararnos unos bocatas e ir comiendo mientras veíamos el parque.
Para poder visitar el parque hay diferentes opciones: andando, alquiler de bicicletas o en carruaje de caballos. Nosotros queríamos estirar las piernas así que decidimos hacerlo a pie.

Tras un breve paseo llegamos a Muckross Abbey, se trata de unas ruinas de un convento franciscano del siglo XV, justo en el centro hay un enorme tejo que dicen que es tan antiguo como el convento ¿será cierto?
Después fuimos dando un paseo por el parque natural de más de dos horas, dos horas en las que pudimos ver diferentes tonalidades de verde, musgo que cubrían árboles enteros, helechos gigantescos, lagos increíbles… No es de extrañar que este fuera uno de los lugares que más nos gustó de Irlanda ¿no?


Tras el paseo llegamos a Muckross House que es una impresionante mansión victoriana en la que se pueden encontrar objetos de la época. Nosotros preferimos tumbarnos en los jardines de la mansión mientras veíamos como una familia jugaba al hurling.


Tras un breve descanso volvimos hacia el coche para dirigirnos a la Cascada de Torc, que tiene unos 15 metros de altura. La cascada en sí no tiene mucho pero el parque en general es una pasada, totalmente recomendable.
De camino al pueblo paramos a visitar el Castillo de Ross, el cual se encuentra a orillas del Lower Lake. El castillo es del siglo XV y fue uno de los últimos en sucumbir a Cromwell, nos hubiera encantado entrar en su interior y subir su escalera de caracol pero ya era tarde y acababan de cerrar por lo que no pudimos visitarlo (es lo que tienen los viajes en carretera que siempre hay algo que te pierdes por los horarios).

Así todo, valió la pena acercarse hasta allí para poder dar de comer a los patos y contemplar las vistas del lago.
KILLARNEY
Tras un largo día, llegamos a nuestro alojamiento en Killarney Sugan Hostel en esta ocasión lo reservamos a través de Hostel World porque no sabemos cómo pero se nos había olvidado reservar y nos dimos cuenta una semana antes del viaje que no teníamos dónde dormir, así que no teníamos muchas opciones de alojamiento. Aunque el hostel estaba bastante bien, limpio y con desayuno, ya sabéis que nosotros no somos exquisitos con los alojamientos. Además estaba guay porque estaba ambientado en El señor de los anillos.
Después de acomodarnos, fuimos a dar un pequeño paseo por Killarney, antes de adentrarnos en ella decidimos llenar el estómago y tomarnos una buena pinta, elegimos el pub The Laurels y cenamos muy bien y nada caro, Sara cenó alitas de pollo súper picantes y Juan Portobello Mushroom, estaba todo riquísimo.

Tras la cena fuimos a dar un paseo por la ciudad y nos acercamos a visitar la Catedral de St. Mary, que es del siglo XIX y de estilo neogótico.

La ciudad en general es muy turística, aunque se debe a su cercanía al anillo de Kerry, cómo lo importante de la ciudad era su esencia decidimos volver a la calle principal y pasear por ella, escuchando música en directo y entrando en los pubs.

Acabamos entrando en el que estaba debajo del hostel, que como os hemos dicho estaba ambientado en El señor de los anillos y tomamos unas cervezas propias del bar, cómo no con nombres del famoso libro.

Después de tomar las cervezas y escuchar música irlandesa nos fuimos a descansar, pues al día siguiente nos esperaba el famoso anillo de Kerry.
Ya sabéis, que cuando acabamos el Diario de viaje os dejaremos el mapa completo de los lugares que visitamos cada día. De momento esperamos que la entrada os hay gustado y que os sirva para vuestros futuros viajes. Ya sabéis que si tenéis alguna duda o sugerencia nos podéis dejar un comentario (que hacen mucha ilusión) o mandarnos un correo a blogparejaviajera@gmail.com
¡Saludos viajeros!
Chicos me encanta! Cohb es como las painted ladies de San Francisco pero rollo rural. Preciosas
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Siii, mereció mucho la pena subir la cuesta!! ❤️💚💙💜
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Qué guay todo lo que estáis visitando! Esperamos un día poder ir por aquellas tierras! Gracias por compartir!
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Si! Irlanda nos encantó!!! ❤️❤️❤️
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Qué buena pinta el viaje que hicistéis!! A ver si vamos por allí!! 😍😁❤
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Animaos! Porque es un viaje inolvidable!! 😉😊
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Que bonito Cork y Cobh !!! Dan ganas de ir 😊
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